El proyecto consiste en la construcción de una piscina situada  en un medio eminentemente rural. En este territorio, como en el resto de la isla, existe una tipología agrícola de almacenamiento de agua: el “safareig”. Estos depósitos eran construidos por los campesinos para almacenar agua durante todo el año, y hacerla servir en los momentos necesarios para regar sus campos. Estas construcciones emergen del plano del suelo y están construidas con piedra del entorno, habitualmente con piedra calcárea o de marés según la disponibilidad del material en la zona.

El proyecto se inicia planteando las mismas preguntas que se debían plantear los campesinos para construir el “safareig”:

1.- ¿Qué superficie ocupa el “safereig”?  La superficie ocupada es la propia del depósito, sin alterar el entorno para su uso agrícola. En el caso de la piscina, ésta se coloca en medio del patio manteniendo en el resto del patio la tierra vegetal.

2.- ¿Cómo se coloca en el terreno? El “safereig” se adapta al terreno y sobresale de la superficie lo necesario para sacar el agua por gravedad. En Son Mesquida la piscina sobresale del terreno entre 40-50 cm para que el perímetro de ésta pueda ser utilizado como banco.

3.- ¿Cómo se construye? Los materiales que se solían utilizar eran materiales del entorno, en este caso se hace servir la piedra de marés.

El resultado es una piscina que pueda ser utilizada durante todo el año, en verano para el uso lúdico del baño y en invierno como un banco corrido que envuelve una lámina de agua.

La piscina se ha construido con piedra de marés de 80x40x20 cm. Este modulo ha definido las dimensiones de la piscina, que hace un total de 10 m x 4,4 m.